AdriK nos trae esta vez un especial de Harry Potter, un intenso análisis de cada una de las películas de la famosísima saga y también nos cuenta su opinión de la tan esperada primera parte de la séptima película
(No hay spoliers, ¡no os arruinaremos la sorpresa!)
Desde la década del ’90, pocos libros han logrado marcar la vida de los jóvenes como lo ha logrado Harry Potter. Año tras año, miles de chicos y adultos alrededor del mundo esperaban ansiosos por la salida del nuevo título de la saga.
Para mi, fue así. Lo leí por primera vez cuando tenía once años (y eso que leí el tercer libro primero) y fui arrastrada a ese mundo que hasta el día de hoy, diez años más tarde, sigue siendo uno de mis libros de cabecera. Ahora, ante la víspera de la salida de la (primera parte) última película, Harry Potter vuelve a ser el tema hablado por todo el mundo.
Son tantas las cosas que puedo decir de estos libros y películas que intentaré no irme por las ramas y escribirles un ensayo, porque no es la cuestión.
Cuando salió Harry Potter y la piedra filosofal, en el año 2001, el furor que causó fue increíble. Ahora que lo pienso, dudo mucho que puedan encontrar muchas películas con tantas ansias por ser vistas como esta. Recuerdo que la primera vez que la vi salí fascinada, al estilo “nunca había visto una película tan buena como esta”…bueno, hay que perdonarme, tenía unos inocentes once años y era más fácil de complacer. En estos momentos, raramente la veo y, si lo hago, mi mente grita por que apague el televisor. Harry Potter y la piedra filosofal es una película de niños desastrosa. Aunque esté, dentro de todo, bien adaptada al libro, la película termina aburriendo en cierto sentido. Es más una película meramente comercial que cualquier otra cosa. De esas que las hacen no para complacer a los fanáticos, sino para complacer el bolsillo de los productores. Tengo que perdonar a los actores principales (entiéndase, los papeles de Harry, Ron y Hermione) porque no tenían experiencia y eran a penas unos niños, y eso se nota.
Chris Columbus, reconocido director de películas con grandes efectos, siguió siendo el director de la saga al año siguiente, con Harry Potter y la Cámara de los Secretos. No soy gran fan de él y se nota. Ninguna de las dos películas son interesantes. Otra vez, la película aburre. No tiene la esencia de los libros, pierde todo el sentido emocional. Es, simplemente, una película fantasiosa que solo vale la pena verla una vez. Se basa más en la “grandeza” de los efectos especiales que en el desarrollo de la trama.
En cambio, a partir de la tercera, las cosas comienzan a cambiar. Con un cambio de director, salió Harry Potter y el prisionero de Azkaban. Esta vez, el elegido fue el mexicano Alfonso Cuarón. Para los que no lo conocen, es el mismo director encargado de películas como la grandiosa Y tu mamá también. Por primera vez, la película se volvió más adulta. Visualmente, refleja mucho más el libro. Es más oscura, con más suspenso. Los dementores que crearon se parecen más a los que imaginamos cuando leemos el libro. El conflicto emocional que tiene Harry Potter al descubrir la existencia de su padrino, Sirius Black, es un factor importante para que la película sea interesante. Daniel Radcliffe comienza a mejorar sus actuaciones, aunque sigue siendo aquel niño actor que todavía no termina de gustar.
A continuación, salió Harry Potter y el Cáliz de Fuego, con Mike Newell en la dirección. Todos los cambios en la dirección son notorios, y ésta no es la excepción. Newell es un director dedicado más que nada a películas románticas, y en esta versión estuvo a punto de no llegar a la altura. La película comienza bien, fiel en todo lo posible al libro de 700 hojas, pero el final llega de repente, demasiado rápido para poder ser apreciado. Después de la tercera, esta película tuvo a los críticos divididos, y después de la genial producción que hizo Cuarón, era esperable. Lo mejor de todo, y todos los fans esperábamos ese momento culminante, fue Lord Voldemort. Ralph Fiennes creó un Voldemort real, aquel que persigue a Harry Potter en sueños y que tanto fascina a los lectores. Trajo a la vida a uno de los grandes malvados del mundo literario. Pocas veces un malvado toma posesión de la película, dejando a un lado a los actores principales como en esta ocasión.
Harry Potter y la Órden del Fénix llegó en el año 2007 y su director fue David Yates. Otra vez, tenemos un director dedicado a las películas con temática romántica, solo que su trabajo fue mejor que el de Newell. A pesar de ser el libro más largo de la serie, la película es la más corta de todas. Fueron cortadas y modificadas varias partes, pero la intensidad de las emociones de Harry Potter son mucho más impresionantes que en las anteriores. Posiblemente, esta sea la mejor de todas las películas de la saga (aunque guardo ciertas reservas). Dolores Umbridge, personificado por Imelda Staunton, es uno de los grandes aciertos.
La última película que ha salido hasta la fecha (hasta el gran estreno de hoy) es Harry Potter y el Príncipe Mestizo. Yates demostró ser capaz de llevar a cabo una buena película por lo que se mantuvo en su cargo de director. La película es, en mi opinión, la que mejor refleja los constantes conflictos emocionales que están tan visibles en el libro, no solo por parte de Harry Potter sino también por Draco Malfoy, cuyo actor (Tom Felton) demostró ser mejor actor que Daniel Radcliffe, quien es simplemente una cara bonita más que un actor con todas las letras. Es una película que ya no hace tanto hincapié en la magia, sino que es más realista que las demás, volviéndose una película más seria, acorde a sus fans. Sin embargo, tengo que recalcar que el final no es tan grandioso como se esperaba. Nuevamente, vuelve a resurgir un error que ya había demostrado ser fatal: la rapidez con la que todo sucede. Yates parece no haber aprendido de su predecesor, y el final llega tan pronto y con tan poca intensidad que termina dejando un gusto amargo después de una película tan bien hecha. El capitulo tan emocional sobre la muerte de Dumbledore es destrozado por una escena que raya lo aburrido y, toda emoción que se puede encontrar, tiene más que ver con la imaginación y el recuerdo de los lectores que lo que haya logrado el director en sí.
Tal como vemos, Harry Potter tuvo sus bajas y sus altas. Tendremos que esperar a que finalmente se complete la saga para poder ver si el verdadero final de todo este viaje llega a la altura...
Harry Potter 7 - Parte I
Finalmente, ha llegado el momento que miles de fans en todo el mundo han esperado: la salida de “Harry Potter y las Reliquias de la Muerte”. Por todo el mundo, chicos y chicas han hecho cola por horas para poder ver lo que ya es llamado el comienzo del fin (anécdota personal: yo hice cola cinco horas).
Tengo una sola palabra: impresionante. Fui con desconfianza, ya que sabía que David Yates volvía a estar detrás de la cámara, pero me ha cerrado la boca. Es la primera película que no ha dejado de lado ni una sola cosa importante (hay muy pocas variaciones u omisiones) y mantiene el carácter oscuro que va con la historia. Yates y sus editores de fotografía han sabido tomar los elementos de Chris Columbus y Alfredo Cuarón para traernos una película que satisface a todos los fanáticos, incluso a los más críticos. En todo momento te encuentras sentado al borde de la silla, esperando ansioso porqué vendrá a continuación, aún para aquellos que conocemos el libro de memoria. Aún así, hemos dejado a un lado la clásica película para niños, puesto que hay momentos en que pueden ser muy fuerte para ellos. Es una película para ser visto a partir de los doce años en adelante.
Los efectos son increíbles. No quiero arruinar la sorpresa, pero más de una vez yo misma me he quedado con la boca abierta. Nunca en una película de Harry Potter se habían utilizado este tipo de cosas, nunca habían creado criaturas tan magníficas. Lo más impresionante: el cuento de Beedle, el bardo.
Sin embargo, no todo aquí son rosas. Los actores Daniel Radcliffe y Emma Watson han mejorado en su actuación, pero siguen sin terminar de gustarme. Hay momentos en que sus gestos son sobreactuados. Agradezco que no tanto como en las películas anteriores, pero por desgracia, en más de una ocasión me vi negando con la cabeza. Rupert Grint supo interpretar aquellos momentos oscuros de su personaje y su actuación sí que es algo para ver. Y como siempre, Ralph Fiennes y Alan Rickman se llevan todos los aplausos, aunque no aparecen en todo momento. Helena Bonham-Carter trae a una Bellatrix aún más loca que en las anteriores, aunque no sé realmente si esto es un punto a favor o en contra.
La película es emocionante, llena de momentos de acción, terrible, oscura y hasta triste. En otras palabras, esto es, al fin, Harry Potter.
Yo no se pero me encantan esas películas!!! todas son fabulosas... no e leído los libros (pero ganas no me faltan), pero aun así pienso que son geniales.
ResponderEliminarAunque no puedo creer que ya van a acabar... yo crecí con Potter!!!
Gracias por la info.!!!
me encantó tu forma de escribir adri! gracias por recordar aqellas cosas buenas, no tan buenas y malas de cada peli...
ResponderEliminarcoincido conq la ultima es la mejor de todaaaaaas.! saludos!
MarCe!·
los libros son geniales y las películas... las han hecho para mi gusto, muy muy bien. son las mejores pelis que he visto sacadas de un libro.
ResponderEliminary la ultima... la quiero volver a ver!!!
besote y saludos!