Tanto el mundo cómic como el de la
televisión se vio revolucionado en Septiembre del año pasado, cuando Fox
anunció que tenía planes para llevar a Batman a la pantalla chica, pero no como
se había hecho hasta el momento.
Las adaptaciones previas de este personaje
son tantas que ya todos nos sabemos la historia prácticamente de memoria. Los
multimillonarios Thomas y Martha Wayne son asesinados en lo que parece ser un
robo común a la salida del teatro, dejando a su pequeño hijo Bruce como único
testigo, quien vivirá sus próximos años al cuidado de Alfred, su mayordomo y
tutor, a la vez que busca convertirse en un vigilante, un defensor de la
justicia, en una ciudad que parece tenerlo todo, menos eso. Corrupta hasta las
entrañas, Gotham se caracteriza por ser una versión oscura de New York, un
lugar donde los criminales se pasean libremente, pobremente vigilados por un
sistema policial que poco puede hacer para detenerlos.
Sin embargo, lo que más llama la atención
de esta serie, es que no toma a Bruce Wayne como principal protagonista, si no
que retrocede unos años, a los tiempos en el que igualmente reconocido
“Comisionado Gordon” recién ingresaba a la fuerzas policiales.
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| No hay nada mas peligroso que un hombre honesto |
Y será este punto en el cual se desarrolle
la serie. Convirtiendo lo que podría ser una convencional serie policial en
algo mucho más original, en “Gotham” seguiremos los pasos de James Gordon, un
policía correcto y valiendo que acabará haciendo equipo con Harvey Bullock, que
en cuanto a integridad moral deja bastante que desear.
De más está decir que el primer caso
asignado a esta dupla será el asesinato de los Wayne, generando la primeras
relaciones con el futuro protector de la ciudad.
En mi opinión el principal punto fuerte de
la serie es que no sólo veremos el desenvolvimiento de estos personajes en el
turbulento contexto que se presenta ante sus ojos, si no que capítulo a
capítulo veremos pequeños avances (Y no tan pequeños en el caso de aquél
conocido como “El Pingüino”) de quienes, en el futuro, serán los principales
villanos que asolarán la ciudad. Selina Kayle, Poison Ivy, Carmin Falcone,
Edward Nygma, son los nombres que primero nos vendrán a la cabeza con sólo ver
el episodio piloto.
¿Y de qué irá la primera temporada,
actualmente emitiéndose? Aún no se sabe a ciencia cierta. Todo parece apuntar a
Gordon intentando resolver el asesinato de los Wayne en ciertos capítulos
clave, rodeados de los ya tan conocidos episodios “de relleno” de las series
americanas, pero eso sí, tan entretenidos y bien armados que no se convierten
en ningún desperdicio.
Y al parecer será Oswald Cobblepot (alias
“Pingüino”), el villano seleccionado para tomar cierto protagonismo esta temporada, junto con Fish Mooney, quien
merece una mención especial.
Fish será una figura clave en la mafia de
Gotham, y, a mi parecer, uno de los
personajes más interesantes y bien caracterizados que deambulan por sus calles.
Ahora, lo más interesante, es que esto se logra sin ser ésta una figura
proveniente de los cómics del afamado murciélago. Fue creada especialmente para
la serie, y debo decir, el resultado fue fantástico.
Con un nivel actoral impresionante, y una
historia que no te permite despegar del asiento en los cuarenta minutos de
duración de los capítulos, lo que pronto se convirtió en la serie más esperada
del año parece haber llegado para quedarse.
Es tan así que, lo que en un principio fue
un pedido de 16 capítulos, fue extendido a 22
en sólo cuatro emisiones.
Sólo el tiempo podrá darnos a conocer qué
se trae Gotham entre manos. Pero los fanáticos del murciélago ya no podemos
esperar a que comiencen las pistas
acerca de cuándo aparecerá el mítico y enigmático “Jocker”.
Aunque seguramente sea algo que nos harán
desear durante bastante. Mientras tanto, al menos en mi caso, seguiré pegado a
la pantalla, esperando encontrar el más leve indicio.
Matías Pardini.
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